La resistencia a los antibióticos supone un problema de salud pública, pero cada vez más estudios señalan a los tratamientos experimentales con bacteriófagos como una posible solución. La revista Nature Communications ha publicado la historia de un hombre de 56 años que llegó a un hospital de Boston aquejado por una llamativa erupción en la piel que se le había extendido por el brazo izquierdo.
Los médicos del hospital Brigham comenzaron a tratarle con antibióticos, pero no encontraban ningún tipo de mejoría. Tras muchas pruebas y tratamientos para intentar combatirlo, una biopsia con cultivos de microbacteria reveló que se trataba de Mycobacterium chelonae, un patógeno de la familia de la tuberculosis. Francisco M. Marty, médico del hospital de Brigham, al ver que la infección iba cada vez a más, sugirió extraer microbios de las heridas para intentar eliminar las infecciones con otra bacteria de la misma familia. Así apareció Muddy, una terapia fágica que en las pruebas de laboratorio eliminó sin problemas a la Mycobacterium chelonae.
Jessica Little, médico del Brigham, explica que el paciente respondió de manera positiva al tratamiento y que actualmente sigue recibiéndolo. “Es la primera vez que la terapia con fagos se aplica a la M. chelona. Además, es el primer caso en el que se consiguen resultados con un solo virus”.
Una de las mayores expertas en España sobre el uso de fagos en infecciones recalcitrantes, Pilar Domingo-Calap, ha explicado cómo son utilizan este tipo de tratamientos.
«Recurrir a fagos como tratamiento compasivo no es nuevo, pero el hecho de que cada vez haya más casos y con resultados positivos refuerza la necesidad de regular su utilización en clínica”
Pese a los buenos resultados, los especialistas indican que es necesario seguir investigando para mejorar las terapias con fagos, así como la resistencia de las microbacterias a los fármacos. Por el momento, este tipo de tratamientos se usan cuando no hay otras opciones terapéuticas y el paciente está en riesgo.
Es una buena noticia en el mundo de la medicina, pero aún así se deben hacer más estudios para mejorar los resultados. En Formación Alcalá sabemos que la resistencia de los virus a los antibióticos supone un grave problema de salud pública así que ofrecemos varias formaciones para ayudar a combatir estas infecciones.