¿Qué es el desgaste por empatía?
El desgaste por empatía o traumatización vicaria es una consecuencia de la preocupación por los otros o por su dolor emocional, podría aparecer repentinamente y sin previo aviso y podría relacionarse con una especie de trauma secundario o vicario, debido a la relación con personas traumatizadas o que sufren.
Se caracteriza por surgir tras vivir una o varias situaciones traumáticas que provocan un trastorno por estrés postraumático. Según su teoría, las personas que lo sufren experimentan una apatía emocional, una cierta incapacidad para ponerse en el lugar de otras personas y agotamiento emocional. Los profesionales sanitarios están más predispuestos.
Las personas que lo padecen tienen a reexperimentar lo vivido (a nivel emocional se vuelve a sentir miedo, angustia y dolor), a estar vigilante y alerta aunque la situación traumática haya terminado (seguir activado como cuando sucedió, es decir, no se ha desconectado del acontecimiento), y a evitar lugares y detalles que le recuerden la situación traumática.
Manifestaciones clínicas
SIGNOS:
Hiperactivación
- Aumento de la frustración.
- Aumento de la percepción de exigencias y de amenazas.
- Estallidos de ira.
- Incremento de ansiedad.
- Problemas de sueño.
Evitación
- Automedicación y/o adicciones.
- Deseo de evitar los pensamientos.
- Evitación de conversaciones asociadas al dolor del cliente.
- Evitación de la exposición del material traumático del cliente.
- Evitación de salidas extralaborales con los compañeros.
- No querer volver ahí otra vez.
- Pérdida de energía.
Reexperimentación
- Distrés psicológico y/o fisiológico.
- Pensamientos intrusivos.
- Pensamientos e imágenes asociadas con experiencias traumáticas de los clientes.
- Pensamientos y sentimientos de falta de idoneidad como profesional asistencial.
- Sueños intrusivos.
SÍNTOMAS:
Reacciones somáticas
- Aceleración del ritmo cardíaco.
- Agotamiento y pérdida de fuerza.
- Aumento de quejas físicas.
- Desempeño reducido.
- Disminución de la eficacia.
- Dolores de cabeza.
- Dolor de espalda.
- Falta de energía.
- Malestar estomacal.
- Pérdida de resilencia.
- Propensión a accidentes.
- Recuperación física, más lenta y costosa.
- Temperatura corporal fluctuante.
- Tensiones musculares.
Reacciones sociales
- Ausencia de disfrute con las actividades de ocio.
- Incapacidad para abordar o paliar el sufrimiento.
Reacciones emocionales
- Cuestionamiento de creencias espirituales.
- Desinterés por la introspección.
- Falta de consciencia espiritual.
- Juicio empobrecido.
- Merma en el discernimiento.
Reacciones cognitivas
- Aburrimiento, desinterés.
- Atención disminuida.
- Desorganización.
- Menor capacidad de concentración.
- Problemas de concentración.
- Recuerdos de cosas.
- Sueños y pesadillas recurrentes.
Tratamiento
Para el tratamiento del desgaste por empatía muestra efectividad el tratamiento farmacológico, la psicoterapia, dormir adecuadamente, alimentarse de forma equilibrada, y realizar ejercicio físico regular, entre otros. Además existen estrategias para afrontarlo:
- Afrontamiento centrado en el problema:
- Enfrentarse con confianza.
- Suprimir actividades competitivas.
- Disponer de más tiempo.
- Afrontamiento emocional:
- Reinterpretar positivamente las situaciones.
- Búsqueda de apoyo social:
- Ayuda y apoyo emocional.
- Búsqueda de buenas relaciones.
Este artículo está basado en la tesina realizada por Alba Soriano Ariño para el Experto Universitario en Atención Sanitaria Urgente en Situaciones Extremas y Catástrofes realizado en Formación Alcalá.
