Según las últimas cifras oficiales, en España viven actualmente aproximadamente unas 160.000 personas mayores de 65 años procedentes de Europa.
Cada vez son más los turistas que viajan no solo por motivos vacacionales, sino que aprovechan su estancia en busca de asistencia sanitaria. España es un destino turístico preferente a nivel global. Pero dentro de la industria turística, el turismo sanitario se está haciendo un hueco. Este turismo factura ya cerca de 75.000 millones de euros en todo el mundo, y según las estimaciones del sector seguirá creciendo en los próximos años.
Según el informe publicado por Spaincares, en España se prevé que el turismo sanitario en 2017 genere unos ingresos de 500 millones de euros, y más de 600 millones en 2019. España ocupa la 12 posición en el ranking de países. En primer lugar se encuentra Estados Unidos, seguido de Alemania y Japón, y justo por delante de España se sitúa China.
Los turistas más frecuentes en nuestro territorio proceden principalmente de Rusia y países árabes. El perfil del turista de salud que llega a España se caracteriza por tener un poder adquisitivo medio/alto y una media de edad que supera los 50 años. La mayoría de los turistas de salud ya conoce el país y suele complementar esa oferta sanitaria con otras alternativas gastronómicas o culturales. Los tratamientos más demandados son los de antienvejecimiento, patologías cardiacas, traumatología, urología, prótesis de caderas y rodillas.
Aunque las perspectivas de crecimiento son buenas, la propia industria del turismo de salud reconoce que es necesaria una estructuración del producto en un paquete en el que se oferten todos los servicios requeridos por el turista, así como las adaptaciones de idioma.
Mónica Figuerola, directora de Spaincares, asegura que el turismo de salud es muy atractivo para hoteles, balnearios, spas y clínicas privadas. Este tipo de turista gasta entre 6 y 10 veces más que uno convencional, siendo sus estancias más largas. Cada visitante que viene a España pasa de media en el país unos 12 días, en los que gasta 1155 euros aproximadamente.
España es uno de los mejores destinos para los pacientes que quieren mejorar determinadas dolencias. Es un país que está sabiendo entender el envejecimiento de la población como una oportunidad y no un problema. Entre las ventajas del turismo de salud en España podemos encontrar la posibilidad de tener vacaciones a pesar de sufrir algún grado de dependencia, ya sea física o un deterioro cognitivo.
A nivel global, la complementariedad entre el turismo médico y el de bienestar es fundamental. Según diversas investigaciones, el afecto positivo o bienestar emocional protegen a los individuos del deterioro físico producido por la edad, repercutiendo positivamente en su independencia funcional y esperanza de vida.
Para el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, el turismo de salud será clave para la economía española en los próximos años.
Fuente: https://www.clubinfluencers.com/auge-del-turismo-sanitario-espana/